domingo, 12 de septiembre de 2010

TURQUIA 2010: QUINTOS! Hicimos mucho con no tanto

Mundial de grandes Ausencias y tremendos reemplazos, Turquía 2010 será recordado para mi como el mundial de basket de más alto nivel que me tocó ver.  Grecia 1998: monólogo Yugoslavo; Indianapolis 2002: casi lo ganamos yendo los bifes contra cualquiera, Japón 2006: solo España y Argentina jugaron al basket, el resto, cambió la pelota por defensas zonificadas. Estambul, Esmirna,  Ankara y Kaysera fueron testigos de partidazos donde se vio la máxima expresión de este deporte que tanto apasiona a mucha gente.

En lo que a los argentinos respecta,ante las sorpresivas bajas de Figueroa, Cantero y Nocioni y el virus estomacal de Oberto (descontando la anunciada de Manu Ginobili), empezamos con bronca, desilusión, incertidumbre en una primera ronda complicada. Frente a planteles como Alemania que ya no juegan para Nowitsky y si para el equipo, Serbios que tienen un presente tremendo y un futuro prometedor o Australianos que por suerte nos regalaron las llaves del cierre del partido, la selección argentina de basket la pasó en un 2do puesto merecido.

Con suplentes que cumplieron con creces sus roles (Cequeira, Gutierrez y Mata) y otros que, en pocos minutos en cancha, no aportaron lo que el máximo nivel de basket necesita, estaba claro que, a este equipo, más allá de la inteligencia y carácter para hacer grandes cosas en los momentos de presión, no le sobraba nada.

Al tener pocos elementos de juego, necesitábamos un nivel superlativo de Prigioni-Delfino-Scola. Y, ante el buen scouting de los rivales, hubieron partidos que no dejaban pases limpios entre tandem 1-4.  Gracias a Dios que el de Houston es Argentino.  Puso en caja el difícil cruce con Brasil y hizo decir a  @leaginobili una frase memorable: Si el ahora máximo goleador argentino, era el plomero, el Titanic no se hundía. Justamente, pienso que esta gente tiene un Iceberg en la cabeza, los huevos como dos sifones y un corazón que les llega a la cintura.

Cosas del mundial de basket, la paliza táctica Lituana que potenció con creces nuestras debilidades, no fue el final para argentina. A estos pibes no les gusta perder ni a quien escupe más lejos. Y lo demostraron contra Rusia y España donde sufrimos más de la cuenta.

Que mejor manera de despedirse de lo más alto del ranking FIBA diciéndole chau a la racha negativa frente a los gallegos. Un quinto puesto con un plantel con varios jugadores de la liga doméstica habla bien del basket argentino.  Hicimos mucho con no tanto contra equipos que lo tienen todo. Todo menos el mismo compromiso que tiene el argentino.  Nos espera el preolímpico en Mar del Plata, Londres 2012 y España 2014. Ya sin muchos de estos  jugadores, pero con la misma mística dorada.

sábado, 4 de septiembre de 2010

LA VIDA DA MUCHAS VUELTAS…

Y en cada vuelta una vocación

Con las disculpas al gran Marito Bofill por tomar prestado sin permiso la frase de su himno chamamecero, me dispongo a reflexionar sobre la profesión que llevo adelante hace poco tiempo.

Hace meses que estoy de novio en una relación complicada, dificil y casi enfermiza. Nos estamos conociendo recién y ya nos vemos nueve horas por día todos los días. Mis primeros meses como Licenciado en Administración los estoy ocupando en el sector de Auditoria de JUFEC S.A. Allí, me toca intervenir en sectores de la empresa que la Gerencia considera que necesario. Por lo tanto, la adaptación de estos meses pasó por la vida profesional (con sus ritmos y presiones nada parecidos a los de la facultad), a los modos de la empresa en particular,  y a  los hábitos del departamento que me cobija junto con el que me tengo que inmiscuir.

Nada simple. Con menudos desafíos personales y laborales. A pesar de esto considero que, acondicionarme al baile de colas de leones y caciques sin plumas, se me está haciendo más rápido (no por eso más fácil) que cuando me tocó adaptarme a la facultad en su momento.  Quizás esto se da por una buena previa (la pasantia académica) y los tragos que me tomé en cinco años de vida universitaria. También porque, en este boliche, ya se armó el trencito hace rato y, si no te acoplás rápidamente, el mismo te pasa por encima. Como requecho en el chamamé, hay que emborracharse, pero de optimismo y de ganas de hacer las cosas.

Al solamente sacar la nariz de la frazada, me esta pasando lo que ya en la Universidad me veía venir. En este océano de egresados en ciencias económicas, los Licenciados en Administración somos tan solo una gota frente al tsunami de Contadores. Algo normal y eterno. Igualmente, para mucha gente, toda profesión termina subordinada a la del abogado.

Nuestra visión multidisciplinaria de los procesos administrativos y nuestra capacidad en coordinación de esfuerzos humanos y materiales para el logro de los objetivos de la organización, todavía no es muy valorada. Elegí una profesión donde, al menos en esta región, está todo por hacerse. Por suerte tengo el privilegio de haber caído en una empresa que si volcó su confianza a nuestro perfil profesional.

Frente a esto, no hago más que seguir dos frases de cabecera que tengo, escuchadas directamente de dos líderes reconocidos en lo que hacen: Apuntá al universo, que por lo menos al cielo vas a llegar sabiendo que, no hay peor gestión que aquella que no se hace. La vida da muchas vueltas y en cada vuelta un amor. El mismo amor, por la profesión.