Ese espacio, me llevó a tener acceso a distintos protagonistas del deporte que más me gusta. Uno de ellos era un lungo goyano de 28 años en ese momento que nos decía en una nota meses después de los JJOO Beijing 2008: "...creo también que podría haber jugado un poquito, cinco minutos. No jugar dos minutos del último cuarto de un partido decidido..."
Cuando se discutía la participación de Kammerichs en la selección de Basket, no había gente que lo pidiera a gritos (a pesar de su excelente desempeño en otro Pre Olímpico - Las Vegas 2007- y de ser siempre candidato al MVP de la Liga local). Es más, los que criticaban (y aún lo hacen) su convocatoria, alegan la falta de masa muscular, de altura para posiciones internas y de tiro externo para ser el fiel relevo del chapu Nocioni.
Pero este tipo querible por donde se lo mire. Que habla con la tranquilidad bonachona siempre pero juega como un guerrero del más alto nivel FIBA, logró revertir esos pre conceptos y fue el héroe silencioso de la clasificación de la Generación Dorada a Londres 2012.
Cada tapa, cada rebote, esas cortinas justas y picks and rolls precisos, no solamente hicieron no extrañar al Chapu sino que contagiaba a todo un equipo de ganadores a seguir luchando contra equipos dificilísimos como Puerto Rico y Brasil.
Habiendo jugadores de la talla de Scola, Ginobili, Oberto, todo un estadio coreó su nombre. Y, como somos los lugareños de cualquier lado, vamos a hacer propio victorias personales y decir que puso de nuevo a Corrientes en lo más alto. Esto último me tiene sin cuidado. Quiero que él, sus bigotes y esta Generación pongan a la Argentina de nuevo en lo más alto del podio en Londres 2012. Quien sabe si para esa fecha no nos pica el bichito y vuelve el Blog del Parque.